Los vestidores abiertos son la opción ideal para organizar, clasificar y almacenar toda tu ropa y accesorios en un único espacio. Desde el punto de vista del diseño son vestidores sin puertas lo que permite tener toda nuestra ropa y complementos a la vista. Son una solución elegante que facilita el acceso a toda tu ropa de una manera rápida y fácil. Tienen grandes posibilidades creativas lo que les permite integrarse con facilidad con el interiorismo del resto de la vivienda.
Normalmente se piensa que es necesario tener casas muy grandes para poder disfrutar de un vestidor, lo cual no es del todo cierto. Podemos instalarlo dentro de nuestro dormitorio o en otra habitación en la que además del vestidor también tengamos otro tipo de mobiliario, es decir que no esté exclusivamente dedicada al almacenamiento de ropa.
Principales ventajas de los vestidores abiertos
Una de las principales ventajas es la sensación de amplitud que brindan. Al no contar con puertas que delimiten el espacio, los vestidores abiertos crean una sensación de mayor amplitud visual en la habitación. Esto resulta especialmente beneficioso en habitaciones más pequeñas, donde los armarios tradicionales con puertas podrían hacer que el espacio se sienta más reducido.
Otra ventaja importante es la facilidad de visualizar y acceder a tus prendas. Con un vestidor abierto, todas tus prendas están a la vista, lo que facilita la elección de conjuntos y accesorios. Ya no tendrás que buscar entre cajones o desordenar pilas de ropa para encontrar lo que necesitas. Además, al tener todo a la vista, es menos probable que olvides prendas y accesorios en el fondo del armario, lo que te permitirá aprovechar mejor tu guardarropa.
Los vestidores abiertos también ofrecen la posibilidad de exhibir tus accesorios y calzado de forma decorativa. Puedes utilizar estantes abiertos o vitrinas para mostrar tus bolsos, joyas, sombreros y zapatos favoritos. Esto no solo añade un toque decorativo al espacio, sino que también facilita la elección y coordinación de accesorios con tus conjuntos diarios.
Además, los vestidores abiertos promueven una mejor ventilación de tu ropa. Al no estar confinada en espacios cerrados, la ropa tiene la posibilidad de airearse y evitar la acumulación de olores. Esto es especialmente beneficioso para prendas delicadas o hechas de tejidos que requieren una adecuada ventilación, como la lana o la seda.
¿Qué tipos de vestidores abiertos existen?
Existen diferentes diseños de vestidores abiertos que se pueden adaptar a varios espacios o moldear en función de tus necesidades. Uno de ellos es el diseño en forma de U, que aprovecha las tres paredes de una habitación. Este diseño crea un amplio espacio de almacenamiento en forma de U alrededor de la zona central, permitiendo un fácil acceso a todas tus prendas y una distribución equilibrada de estantes, barras de colgar y cajones.
Otro tipo de diseño es el en línea recta, ideal para habitaciones más estrechas o alargadas. En este diseño, los elementos de almacenamiento se disponen en una línea recta a lo largo de una pared, maximizando el espacio disponible y facilitando el acceso a tus prendas.
El vestidor en L es otra opción popular. Utiliza dos paredes adyacentes para crear un rincón de vestidor. Este diseño es perfecto para habitaciones de tamaño mediano y ofrece un área de almacenamiento amplia y organizada. Puedes aprovechar una de las paredes para colocar una barra de colgar larga, mientras que la otra pared puede albergar estantes y cajones.
Por último, el diseño en isla central implica la inclusión de una isla en el centro del vestidor. Esta isla puede estar equipada con cajones adicionales, espacio para almacenamiento de accesorios o incluso un banco o tocador. Este diseño agrega un elemento central llamativo al vestidor y proporciona una superficie adicional para organizar y exhibir tus prendas y accesorios.
Estilos y diseños más frecuentes
Para inspirarte y ayudarte a visualizar cómo podría quedar tu nuevo vestidor a continuación vamos a hablar de los estilos de diseño más utilizados.
Comenzamos con el estilo minimalista, los vestidores minimalistas utilizan líneas limpias, colores neutros y pocos elementos decorativos. Este diseño se caracteriza por su estética ordenada y sintética. Utiliza estantes flotantes y barras de colgar sencillas para mantener la simplicidad y la elegancia en el espacio.
Por otro lado, el estilo industrial ofrece un vestidor abierto con elementos de diseño urbano y moderno. Puedes incorporar barras de colgar de metal, estantes de madera rústica y accesorios en tonos metálicos. Puedes combinar materiales crudos y acabados envejecidos para crear un ambiente industrial y sofisticado en tu vestidor.
Si prefieres un ambiente fresco y acogedor, el estilo escandinavo es una excelente opción. Este estilo se basa en colores claros, tonos naturales y líneas sencillas. Puedes utilizar maderas claras y añadir detalles en blanco, como cestas de almacenamiento o perchas, para completar el aspecto escandinavo en tu vestidor abierto.
Por último, el estilo rústico es perfecto si buscas un ambiente acogedor y con encanto. Puedes incorporar elementos rústicos como vigas de madera expuestas, acabados envejecidos y muebles vintage. Utiliza cestas de mimbre, perchas de madera y textiles cálidos para completar el estilo rústico en tu vestidor abierto.
Si estás pensando en instalar un vestidor abierto en tu casa ponte en contacto con nosotros, cuéntanos tu idea y juntos la pondremos en marcha. Por nuestra parte recibirás una atención personalizada, totalmente centrada en tus necesidades y un asesoramiento profesional. Verás como te sorprendes de lo rápido y fácil que es trabajar con nosotros, antes de lo que piensas tu vestidor estará acabado e instalado en tu domicilio para que puedas empezar a disfrutar de él.